Todos podemos convertirnos en Raskolnikov en estos tiempos, criminales desesperados por la falta de algo tan superficial como el dinero. El dinero es el motor del mundo que hemos creado, y quien no lo tenga termina por no pertenecer al mundo. No hay vida sin consumo en nuestra realidad cotidiana, y esa desesperación podrá sacar lo peor de nosotros mismos. ¿Seremos capaces de todo por mantenernos a flote en esa realidad falsa que se ha construido sobre el dinero? "El hombre es vil, a todo se acostumbra", es un pensamiento que tiene el protagonista de Crimen y Castigo al comienzo de la novela, y sirve de respuesta.
Yo pienso en los directivos de Endesa, Telefónica y Repsol, empresas españolas que han tenido beneficios multimillonarios estos últimos años, mientras muchas personas corrientes nos gastamos hasta el último céntimo de nuestro trabajo en comprarles los bienes imprescindibles para nuestra vida cotidiana.
¿Tuvieron los directivos de estas empresas padres pensionistas? ¿Se vieron sin trabajo alguna vez? ¿Son todos sus familiares jóvenes y sanos?
Por más que intento explicármelo no logro entender la decisión de subir el precio de esos bienes básicos a lo largo de todo el año, la luz, las llamadas teléfonicas, la tarifa mínima, la gasolina, la calefacción... por no hablar del acoso a ancianos y adolescentes por conseguir nuevos contratos.
Y todo para seguir con beneficios multimillonarios.
¿Cuántos millones cuesta la publicidad de estas empresas? Estos anuncios tan bonitos de la nueva era por un medio ambiente con energías sostenibles, ¿cuánto cuestan?
Parece que sí, que el hombre es vil, y a todo se acostumbra. El crimen está claro, ¿cuál será el castigo?
Lo bueno de los tiempos de crisis es que traen consigo cambios. Tal vez dentro de unos años el odio que la avaricia de estas empresas genera en muchos de nosotros sirva para buscar una gestión distinta de esos bienes. ¿La solución vendrá de los políticos? ¿Para qué existen tantos Ministerios y Agencias por todas partes si no son capaces de garantizar un precio digno para los servicios más básicos? Desde el poder nadie actuará para cambiar el sistema que les ha facilitado llegar al poder. Ni a nivel nacional ni a nivel local. Los primeros seguirán cobrando cada mes nóminas millonarias por sus grandes trabajos en torno a la justicia, las autonomías, o la igualdadzz. Los segundos seguirán enriqueciéndose con sus corruptelas de extrañas comisiones y tráfico de influencias.
¿Y qué hacemos los demás? Aguantar hasta que no podamos más, y más allá. Tal vez cuando ya no quede nada que se pueda robar, el dinero dejará de ser la medida para todos los valores de nuestra sociedad. Y se creará una nueva medida, y sobre ella una nueva política, una nueva economía y una nueva sociedad.
El capitalismo ha demostrado que el dinero genera más dinero. Pero cuando la gente empieza a quedarse sin nada, la falta de dinero genera más falta de dinero. Todo terminará explotando por alguna parte...
Y los que más temen esta nueva situación son precisamente los que la están acelerando. Tal vez les terminaremos dando las gracias!
No en vano, la palabra china para "crisis" significa tanto "época de dificultades" como "oportunidad". Esperemos que, efectivamente, esta "crisis" nos brinde una nueva "oportunidad" para un orden social y económico diferente...
ResponderEliminarSaludos!
joder que bueno!, pero tanto como las gracias....
ResponderEliminary suman y siguen...o restan y siguen
ResponderEliminarañado tras leer crimen y castigo que la escena de la película no tiene NADA q ver con la novela de verdad, no voy a decir nada pa que esto no sea un spoiler, pero vamos...usa un método más contundente, no sólo con la anciana, y desde luego no sale de la casa tan tranquilo... salu2 y gracias x esos comentarios :)
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